El Peligroso Encanto del Abusador: Gas Lighting

0
1164

“Gaslighting” es un patrón de abuso emocional en la que la víctima es manipulada para que llegue a dudar de su propia percepción, juicio o memoria. Esto hace que la persona se sienta ansiosa, confundida o incluso depresiva.

Este término, que realmente no tiene traducción al español, viene de la película clásica de Hollywood llamada “Gaslight”, en la que un hombre manipula a su mujer para que crea que está loca y así robar su fortuna escondida. 

Él esconde objetos (cuadros, joyas) haciéndole creer a su esposa que ella ha sido la responsable, aunque no se acuerde. También atenúa la luz de gas (no había electricidad) y le hace creer que el fuego sigue brillando en la misma intensidad que antes.

Por supuesto, eso hace que la protagonista sienta que se está volviendo loca, no quiera salir de la casa, se encuentre ansiosa y llore continuamente. 

El esposo le advierte que dejará la relación, y la amenaza con mandarla a un doctor para que la medique o recluya. Por supuesto, el abusador sabe muy bien lo que está haciendo y casi consigue su cometido si no fuera por un investigador que descifra la situación y desenmascara al ladrón.

Hay tres etapas de gaslighting  una relación

 

Idealización: En esta etapa, la víctima pierde la cabeza por quien hace luz de gas pues proyecta una imagen de sí mismo como el compañero perfecto

Devaluación: La etapa de la devaluación golpea fuerte: la víctima pasa de ser adorada a ser incapaz de hacer algo bien, pero después de haber probado el ideal, está desesperada por arreglar las cosas.

Descarte:  Luego viene la etapa en la que se deja caer a la víctima para pasar a la siguiente y la descarta: esto sucede a menudo simultáneamente con la fase de idealización con la próxima víctima.

Con el fin de superar este tipo de abuso, es importante comenzar a reconocer los signos y, finalmente, aprender a confiar en sí mismo de nuevo. Según el autor y psicoanalista Robin Stern, Ph.D., los signos de ser víctima de gaslighting incluyen el que:

  • Te auto-critiques constantemente.
  • Te preguntes “¿Soy demasiado sensible?” Varias veces al día.
  • Que a menudo te sientas confundido e incluso loco.
  • Que siempre estés pidiendo perdón a tu pareja.
  • No puedas entender por qué, con tantas cosas aparentemente buenas en tu vida, no seas feliz.
  • Des muchas excusas por el comportamiento de tu pareja, a amigos y familiares.
  • Ocultes información a amigos y familiares para no tener que explicar o dar excusas.
  • Sabes que algo anda mal, muy mal, pero nunca puedes expresar lo que es, incluso a ti mismo.
  • Comiences a mentir para evitar las humillaciones y las torceduras de la realidad.
  • Tengas problemas para tomar decisiones simples.
  • Te parece que antes eras una persona diferente, más segura, más divertida y más relajada.
  • Te sientes desesperada y sin alegría.
  • Te sientes como si no puedes hacer nada bien.
  • Te preguntas si eres una pareja “suficientemente buena”.

Si identificas alguna estás a tiempo de buscar ayuda.

Fuente:  https://espanol.thehotline.org/2016/09/08/sabes-lo-que-es-gaslighting/