Los Colores de los Alimentos, Sus Nutrientes y Beneficios

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Cuando hablamos de los colores de los alimentos y sus beneficios, cada color de un alimento está compuesto generalmente por unos componentes químicos naturales que pueden implicar diferentes efectos positivos en nuestro organismo.

Cada nutriente aporta beneficios específicos al cuerpo humano. Algunos son antioxidantes, otros fortalecen el  sistema inmunológico y otras más son vehículos para vitaminas como la A, C y E.

Rojo – Licopeno

Las sandías, jitomates, papaya y todos los vegetales de pulpa roja tienen un fitoquímico llamado licopeno que es responsable de ese brillante tono.

Además de eso, este pigmento ayuda a la salud cardiovascular y existen estudios que evalúan su efecto retardante en el desarrollo de células cancerosas.

 

Morado – antocianinas

El color azul y morado de los vegetales los aporta un antioxidante llamado antociano. En la mayoría de las frutas en las que aparece -como los blueberries y las uvas tintas-, el pigmento se desarrolla previo a la maduración y su función principal es proteger la pulpa de los rayos del sol.

En el cuerpo funcionarán como una fuente de juventud: mantendrán en condiciones óptimas la piel, fomentarán el crecimiento del cabello y retardarán el envejecimiento de las células.

Amarillo y naranja – carotenos

Se le llama carotenos a ese grupo de pigmentos que aportan colores cálidos a los alimentos, en tonalidades entre rojas hasta amarillas. Siendo más específicos, son los responsables de hacer anaranjadas a las zanahorias, los mangos, y las calabazas.

Cuando consumes carotenos el cuerpo los absorbe y los convierte en vitamina A, esa que es maravillosa para mejorar la vista, la piel y fortalecer el sistema inmunológico.

¡Aguas! Este nutriente generalmente viene enlazado con carbohidratos y azúcares así que es casi seguro que no puedas incluir alimentos naranjas en tu dieta keto u otros regímenes.

Blanco – alicinas y quercetina

Cuando un vegetal es blanco no significa que carece de nutrientes, sino que éstos dan un pigmento claro que es igual de benéfico que todos los demás.

En el caso de las cebollas y los ajos, las alicinas son las responsables de que sean blancas y también de que lloremos a la hora de picarlas.

Por otro lado, los nabos, las papas, los espárragos blancos y hasta los champiñones tienen un antioxidante color marfil llamado quercetina que retarda el envejecimiento de las células.

Verde

Cualquier verdura, independientemente de la intensidad del pigmento, es un vehículo de pura salud. En el caso de las hortalizas -como la lechuga, las espinacas y las coles- son ricas en hierro y magnesio y son éstos minerales los que, acorde a su densidad, darán el tono y sabor exactos.

Otra magnífica noticia de los alimentos verdes es su alto contenido de fibra y antioxidantes. Hablando de esto último, la luteína sobresale por dar color a los tejidos de cada vegetal.